… un trayecto, no un destino. Es la actitud con la que se viaja por la vida.
… un orgasmo. Unos la tienen, otros la tuvieron y otros fingen tenerla.
… una pluma. El viento la va llevando por el aire, vuela tan leve pero tiene una vida breve, necesita que haya viento sin parar. (Vinicius de Moraes)
… la luna. Es posible llegar hasta ella, pero muchos creerán que es una farsa o que es mentira.
… una estrella fugaz. Si no estás atento te la perderás.
… la musa inalcanzable que inspira la historia de mis días.
… una mariposa. Cuanto más la persigues, más huye. Pero si vuelves la atención hacia otras cosas, viene y se posa suavemente en tu hombro.
… una moto. Pasa muy rápido.
… un eco. Contesta, pero no viene a nosotros. (Isabel de Rumanía)
… el agua en el desierto. Muchas veces solamente es una ilusión.
… una taza de café. Te da energías para continuar.
… la gripe. Es un estado que se transmite, se contagia y se propaga.
… un pastel, cuando lo tienes lo saboreas, y cuando no, solo con olerlo basta.
… esos palacios de cuentos de hadas cuyas puertas están custodiadas por dragones: hay que luchar para conquistarla. (Alexandre Dumas)
… una nube. Si la miras fijamente el tiempo suficiente, se evapora.
… nuestra propia sombra. Si tratamos de agarrarla siempre huye de nosotros, pero si damos media vuelta y caminamos hacia la luz, entonces nos persigue.
… el arcoiris, no se ve nunca en la casa propia, sino solo sobre la ajena.
… un beso. Debes compartirla para disfrutar de ella.
… las neblinas ligeras. Cuando estamos dentro de ellas, no las vemos. (Amado Nervo)
… algo que nace del interior. No se puede dar ni quitar… pero sí la podemos compartir.
… un columpio. Unas veces estás arriba y otras, abajo.
… una medicina. Cura todos los males.
… el mando de la televisión. La perdemos a menudo, nos volvemos locos buscándola y, por lo general, estamos sentados encima de ella.
… algo comprado en un todo a cien chino. Sabes que no durará mucho tiempo, pero a veces te sorprende.
La felicidad no es como es. Es como tú la ves.
Hosu.ahora teneis un enlace común. Que bueno. Me alegra
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No, ese es antiguo. No lo usamos. Nadie entra.
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Me encanta tu forma de ver la felicidad y de transmitirlo. Cuando escribes cosas bonitas, como esta entrada y la siguiente del amor, transmites mucho cariño y muchas buenas sensaciones. Y no es fácil. Te felicito una vez más.
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Ya no va a hacer falta que me felicites para mi cumpleaños. Ya tengo felicitaciones hasta que me haga vieja… 😉
Millones de gracias, para compensar.
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Pero sabes que lo haré, por proximidad. 🙂
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Aún queda mucho… A saber qué pasará.
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Espero que para entonces sigamos vivos y te sigas hablando con los pobres
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Yo también lo espero. Lo segundo, de ser el caso, no sé, no sé… Seguro que la fama me cambia.
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Seguro que no. Eres especialmente sensata
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Me admira la capacidad que tienes de admirarme y creerme mejor de lo que soy.
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Y a mí me admira que te admire la capacidad que tengo para admirarte sabiendo que eres mejor de lo que crees
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Venga, te lo voy a conceder porque no quiero seguir con el trabalenguas.
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tan permanente como lo quieras, tan efímera como lo permitas…
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No podría ser más acertada esa frase.
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